Esta es la razón de las pérdidas de Uber y su reto de largo plazo
La atomización no es proceso corporativo novedoso, siempre ha existido pero los tiempos modernos lo aceleran más. Así se explican las pérdidas de Uber
Las acciones de Uber tuvieron un miércoles negro en el mercado “after hours” de Wall Street luego de publicar sus resultados del segundo trimestre del año en las que acumuló pérdidas por más de 5,000 millones de dólares, la acción se desplomó prácticamente 7%; este desempeño eliminaba parte de las ganancias de 8.24% que registrara durante la sesión regular también del miércoles.
Entre los rubros más importantes del balance financiero se observa una menor utilidad, de 3,170 millones de dólares, frente a las expectativas de 3,390 millones. En total las pérdidas ascendieron a 5,240 millones de dólares en el trimestre señalado, con una pérdida por acción de 4.72 dólares, superior al consenso estimado previamente en 3.19 dólares.
En este contexto, llaman la atención los malos resultados de la compañía si revisamos otros indicadores que hablan de crecimiento; por ejemplo, la empresa cuenta ya con casi 100 millones de usuarios activos al pasar de 76 a 99 millones entre 2018 y 2019. Asimismo, de acuerdo con la compañía, los viajes se han incrementado 35% en el mismo lapso de análisis, sin contar con que en mayo pasado recibió una inyección de 8,000 millones de dólares por su salida a bolsa.
La caída de Uber tiene su explicación en una sola palabra, esta palabra es a la vez el reto que la plataforma global de transporte de personas y de comida enfrentará en los próximos meses y años, se llama: atomización.
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La caída y el reto
En efecto, el exitoso negocio de Uber se atomizó, es decir, han aparecido en los años y meses recientes un sinnúmero de compañías que compiten directamente con este gigante, ya sea a nivel global o en los mercados más importantes en los que tiene presencia. La atomización del negocio no es algo novedoso ni exclusivo contra Uber, es algo que ha existido siempre pero que los nuevos tiempos la impulsaron muy rápidamente y han provocado que los efectos sobre los líderes en los mercados tarden menos en presentarse.
Didi, Cabify y Lyft, por mencionar algunas, son las plataformas que pelean palmo a palmo el mercado de transporte de personas a Uber ya sea en todas las partes en las que este gigante se encuentra presente, o bien en mercados estratégicos como China, Brasil, gran parte de Europa Occidental, y México, por supuesto.
La caída de Uber no tiene mayor explicación, se enfrenta a un mercado cada vez más atomizado, con retos, pero también con oportunidades, los próximos meses y años serán fundamentales para que Uber padezca el reto de la feroz competencia que tiene.
En el segmento de reparto de comida, Uber Eats también enfrenta cada vez más competencia, hace unos meses otro gigante como Amazon anunció la compra de una parte accionaria de la empresa Deliveroo, especializada en este segmento y que día a día se posiciona más en mercados importantes como los antes señalados y otros más.
Estamos en un mercado altamente competitivo en el que los negocios exitosos corren el riesgo de atomizarse con mayor rapidez que en otras épocas, la ventaja consiste en que las compañías poco preparadas desaparecen a la brevedad, el reto para los sobrevivientes consiste en aguantar y mantener el ritmo, no sin antes llevarse “sustos” como el que se ha llevado Uber.
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Los fundamentos de Uber
Será un proceso relativamente corto, aunque puede incluir algunos años, todo dependerá de la forma en la que se vayan acomodando las fichas, junto con los avances tecnológicos que permitan innovaciones para impulsar el negocio.
Uber tiene la ventaja de ser pionero y de que los inversionistas confían en la compañía, su valor de capitalización por 67 mil millones de dólares es todavía un referente muy importante para el mercado y lo más importante, la marca está consolidada. Pero, los riesgos en el mercado seguirán presentes, lo que recuerda a los estrategas de la compañía que tienen poco margen para dar pasos en falso.
Uber inició sus operaciones en bolsa con un valor por acción de 45 dólares y actualmente cotiza en poco más de 40 unidades luego del golpe vespertino de ayer.
En este sentido, los tiempos corporativos modernos son lo más parecido a la “selección natural”, solamente los más fuertes y preparados sobreviven al entorno, los débiles son engullidos por los gigantes o simplemente desaparecen.
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