Así se reinventa Pochteca frente al estancamiento y caída de petróleo
La empresa mexicana inauguró una planta y centro de distribución en Jalisco, en la que invirtió 13 millones de dólares.
El estancamiento de la economía mexicana y la caída de los precios del petróleo y productos químicos a nivel internacional cobró factura a Grupo Pochteca que, para dar la vuelta a esta situación, abrió la cartera para ampliar una planta en Jalisco, en donde también instaló un centro de distribución (cedis).
Con esta inversión de 13 millones de dólares, la empresa mexicana hará frente a la creciente demanda de sus dos nuevos segmentos de negocio: la recolección de residuos industriales peligrosos y el servicio de logística especializada para terceros, que se conoce como 3LP.
Grupo Pochteca vio una oportunidad para estos nuevos segmentos en su ya diversa oferta de negocios ante la caída de sus ventas por la baja mundial en los precios de los químicos y el petróleo, que afectan la facturación pesos, pese al aumento en el volumen de ventas de sus productos químicos registra una mayor participación de mercado, cuenta Armando Santacruz, director general de la empresa, en entrevista con Alto Nivel.
“Al meternos a negocios de recolección de residuos y el 3PL generamos ingresos, le damos la vuelta a esta problemática de la caída en los precios. Vimos otros negocios que podíamos montar en la estructura y certificaciones internacionales que tenemos, y que nos generan ingresos en una forma complementaria a los productos que hoy en día vendemos”, dijo Santacruz.
La compañía reportó ventas consolidadas por 4,837 millones de pesos de enero a septiembre de 2019, cifra que representa una baja de 0.6% frente al mismo periodo del año anterior, a causa de los bajos precios de los productos químicos, de acuerdo con información de su reporte financiero.
En el mismo lapso, el flujo operativo de la empresa, que cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) con la clave de pizarra Pochteca, cayó 7.7% a 250.8 millones de pesos, mientras que la utilidad de operación disminuyó 29.4%, informó la emisora en su reporte del tercer trimestre del año.
Esta no es la primera vez que Grupo Pochteca se reinventa. La compañía nació en 1990 como distribuidor de papel y, ante la caída de la industria con la transformación tecnológica, entraron al negocio de lubricantes y grasas comerciales 2010, y cinco años después al negocio de los productos químicos.
Con las nuevas vertientes de negocio, Pochteca ofrece a otras empresas del sector químico servicios de envasado, almacenaje, y entrega, además de aprovechar su infraestructura y profesionalización de su personal, para el manejo de residuos tóxicos y peligrosos como ácidos, abrasivos y corrosivos.
“Las empresas sólo sobreviven décadas si saben reinventarse, si uno se queda en lo que le funcionaba y eso deja ser rentable, se tiene que hacer mejor, o lo único que va a pasar es que va uno a tender a desaparecer”, apuntó Armando Santacruz.
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Entre el estancamiento económico y la inseguridad
El estancamiento de la economía mexicana,
que de acuerdo con muchos expertos en materia económica se encuentra en
recesión técnica, también impactó el negocio de productos químicos que se
emplean en la industria de la pintura y el recubrimiento.
De acuerdo con el director general de Pochteca, la caída en este rubro está relacionada con el nulo crecimiento de México, que afecta de forma directa a la industria de la construcción, cuyo valor de producción cayó 10.2% en agosto, en su comparación anual, y de 1.5 en la comparación mensual, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“La caída de nuestro negocio de venta de productos para pinturas y recubrimientos ha sido por la situación del país, porque la construcción se colapsó, y el principal comprador de la industria de recubrimientos es esta industria”, dijo Santacruz.
Inseguridad frena más inversiones
El empresario añadió que la inseguridad es otro factor que en México frena la inversión, y que se suma a la incertidumbre en el ambiente de negocios, del cual hicieron hincapié en su reporte del tercer cuarto del año.
“Nosotros hemos tenido uno de los peores años en el robo de transporte, es terrible porque uno nunca sabe si el chofer y el producto van a llegar a su destino, entonces yo sí creo que es imperativo para que la inversión se vigorice y que haya una mejora en la seguridad. Hemos expresado esto a través de ANIQ, pero desgraciadamente no hemos visto una mejora”, puntualizó.
Armando Santacruz detalla que, la inversión es proporcional al nivel de incertidumbre, es decir a mayor incertidumbre plazos más cortos de inversión y montos más bajos de inversión, por tanto ve un área de oportunidad para el gobierno actual para generar mayor certidumbre.
Aún con el complicado panorama para el próximo año, que pudiera complicarse si se conjuga una desaceleración local y con una en Estados Unidos, el empresario se dice optimista en cuanto a sus nuevos negocios, los cuales le darán rutas de crecimiento aún cuando en los negocios tradicionales pudieran enfrentar dificultades.
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