El peso termina sexenio sin depreciación por primera vez desde 1970
Si bien la disciplina fiscal durante los primeros cinco años fue un factor importante, dos elementos externos explican gran parte de la apreciación del peso.
El peso mexicano registrará el primer sexenio sin depreciación desde la era del desarrollo estabilizador, lo cual es un logro destacable. Sin embargo, el contexto internacional fue clave para entender este fenómeno.
Al 27 de septiembre, el peso había mostrado una apreciación del 2.57 % durante el sexenio, y salvo un evento imprevisto, no se esperan grandes variaciones al cierre del mes de septiembre y del mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador. La última vez que se observó estabilidad o apreciación del peso a lo largo de un sexenio fue durante la presidencia de Gustavo Díaz Ordaz (1964-1970).
En 1976, al final del sexenio de Luis Echeverría, el peso sufrió una devaluación del 25.52 %, marcando el inicio de una tendencia de devaluaciones sexenales. El peor caso fue el del presidente Miguel de la Madrid, quien durante su mandato (1982-1988) entregó una devaluación de 3,904.58 %. Más recientemente, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, el peso se devaluó un 51.50 %, la mayor caída de este siglo. En comparación, la apreciación del 2.57 % en el sexenio actual marca una diferencia significativa.
Factores detrás de la apreciación
Si bien la administración saliente mantuvo disciplina fiscal y respetó los fundamentos económicos, dos factores globales explican gran parte de la apreciación del peso durante el sexenio:
- Guerra comercial entre China y Estados Unidos
La disputa comercial entre las dos mayores economías del mundo generó una reorientación de inversiones hacia México, como parte del fenómeno de nearshoring. Además, la “gran renuncia” en Estados Unidos tras la pandemia incrementó la demanda laboral para migrantes mexicanos, lo que impulsó los flujos de remesas. La guerra comercial también trajo inversiones directas, particularmente de China, que trasladó fábricas a México para evitar los aranceles estadounidenses. - La era de las tasas de interés cercanas a 0 %
La crisis derivada de la pandemia llevó las tasas de interés en los países desarrollados a mínimos históricos, incluso negativos en algunos casos. Este escenario favoreció a México debido al amplio diferencial de tasas, que en ciertos momentos alcanzó niveles de hasta 8 % a favor de la economía mexicana. Esto atrajo flujos de capital a corto y mediano plazo, contribuyendo a una apreciación constante del peso. Incluso cuando las tasas globales comenzaron a subir por la inflación, México mantuvo una ventaja competitiva con tasas nominales que llegaron a un máximo de 11.25 %, mientras que en Estados Unidos fueron de 5.5 %. Para los inversionistas, las tasas reales en México (del 6 %) resultaron muy atractivas.
Estos dos factores fueron cruciales para que el peso lograra su primera apreciación en casi 55 años, impulsada principalmente por un contexto global que, a pesar de sus desafíos, resultó beneficioso para la economía mexicana.
MÁS NOTICIAS:
- Hospitales MAC invierte 200 mdp en tecnología para atención médica
- Reportan 31,000 millones de intentos de ciberataques en México en primera mitad de 2024
- Fed advierte que la inflación sigue alta, pese a recorte de tasas
- Peso retrocede 0.77% tras dato positivo de inflación en México
- FBI crea una criptomoneda para destapar fraudes y presenta cargos contra 18 entidades