Olvida la inflación, la variante Delta es el nuevo obstáculo para la recuperación económica de México y el mundo
El Covid-19 está cerca de cumplir dos años en el planeta, y mantiene en la incertidumbre a la economía global.
La variante Delta del coronavirus se posicionó esta semana como la principal variable de preocupación para los inversionistas a nivel global, convirtiéndose así en el principal obstáculo para la recuperación económica en el planeta.
Esta variante del coronavirus se extiende incluso en las economías avanzadas a pesar del elevado porcentaje de la población que ha recibido al menos una dosis de la vacuna. Por supuesto que la amenaza se incrementa conforme las poblaciones tienen menores índices de vacunación.
Esta variante tiene una carga viral mil veces mayor a las mutaciones convencionales del Covid-19, convirtiéndose ya en el gran obstáculo para superar la pandemia actual porque no sólo es más contagiosa, sino que también tiene un alto potencial para provocar reinfecciones, señalaron los más recientes estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En México este miércoles se reportaron 15,198 nuevos contagios en las últimas 24 horas, se trata de la cifra más alta desde enero, cuando el país vivía una ola de rebrotes y contagios posteriores a las fiestas navideñas.
La preocupación por la variante Delta se intensifica cada vez más; apenas el 19 de julio los mercados financieros globales vivieron un “lunes negro” con la mayor caída de las bolsas de valores en Wall Street desde octubre de 2020, así como descenso en las cotizaciones del petróleo, todo debido al aumento de los contagios con esta variante alrededor del mundo.
¿Por qué preocupa Delta a la economía mundial?, ¿puede convertirse de verdad en un obstáculo para la recuperación de la economía del mundo?
Así puede impactar Delta
El riesgo para la economía mundial consiste en que podría generarse un “frenón” conforme avancen los contagios. Hasta ahora se excluye la posibilidad de un nuevo Gran Confinamiento, pero sí la posibilidad de que las cadenas productivas no se reactiven como se esperaba, que baje la dinámica de la economía global empezando por las grandes economías como las de Europa, Estados Unidos e incluso China, así como un impacto mayor en naciones en desarrollo y que se interrumpa un proceso de recuperación por la extensión de la pandemia.
Entre analistas internacionales el gran temor consiste en que la propagación sin control de la variante Delta prolongue la pandemia y, con ello, se extienda más el proceso de recuperación que ya estaba en puerta y que se auguraba sería una realidad este mismo año en muchas partes del planeta como Estados Unidos, Europa y gran parte de Asia. Pero el temor a un “frenón económico” es sólo una parte, existe algo adicional.
Otro grupo de analistas temen escenarios más dramáticos para los próximos meses si la variante Delta del coronavirus sigue propagándose por el mundo: Dicho temor consiste en un “paro o freno total”, aunque sea momentáneo, en la actividad económica, pese a que no haya un nuevo confinamiento global, este “paro o frenón momentáneo” estaría determinado por un nuevo desplome en la demanda conforme los casos de Covid-19 aumenten por los contagios con la variante Delta, y sea necesario reducir el ritmo de la economía para disminuirlos.
Inflación era por demanda, Delta es por riesgo de una caída económica
En lo que va de 2021, la inflación ha preocupado a los inversores por los niveles tan elevados en los que se ubicaba, cada vez más alta a causa del aumento en la demanda de productos y servicios. El repunte económico en muchas regiones del planeta fue tan rápido que puso en jaque las cadenas productivas e impulsó la demanda en exceso para las condiciones en las que estaban muchas economías. Pero había expectativas de recuperación y crecimiento.
Ahora nos enfrentamos a un posible regreso de las condiciones vigentes el año pasado, de freno económico y en muchos casos de inactividad, eso es peor porque significa un retroceso, la posibilidad de que se borre lo que se avanzó, muchas naciones podrían soportarlo no sin resentirlo, pero en el caso de otros países sería devastador.
Economías en desarrollo, por si algo les faltaba, llegó Delta
Las economías en desarrollo, como la nuestra, van a la zaga de la recuperación. Esta realidad será más preocupante si se aceleran los casos de contagio en estas regiones, pero puede volverse catastrófico si no se gestiona adecuadamente la crisis.
El gran problema consiste en que los sistemas de salud de muchas de estas economías todavía se encuentran colapsados, o cuando menos están lejos de encontrarse en condiciones de soportar una mayor demanda de afectados por la enfermedad.
Si bien los contagios con variante Delta son menos mortales, de acuerdo con las experiencias y los organismos mundiales de salud, inevitablemente los sistemas de salud registran aumentos en su demanda, las economías en desarrollo, en su gran mayoría, no están en condiciones de regresar al escenario del año pasado sin registrar efectos nocivos, podrían reportar un crecimiento mucho menor al esperado, o en un escenario más pesimista y dramático, volver a caer. Si la variante Delta sigue regándose por el planeta, las economías en desarrollo no podrán recuperar hacia mediados de 2022, como estaba previsto, lo que perdieron en 2020.
Estamos en julio, a este año todavía le quedan poco más de 5 meses. Algunos países se han recuperado de manera importante, pero otros todavía están tambaleantes. A inicios de 2021 se advirtió que uno de los grandes riesgos para la economía mundial consistía en la posibilidad de nuevos rebrotes, de nuevos episodios de contagios masivos, y presiones adicionales para los sistemas de salud especialmente en las economías desarrolladas, este escenario podría materializarse.
Otras previsiones también hablaban de que la vacunación sería importante pero no la solución definitiva, mientras no se vacune a la mayor parte de la población mundial con las dosis necesarias, lo que desde luego está muy lejos de suceder. El Covid-19 está a unos meses de cumplir dos años de presencia en el planeta, y sigue infectando a la economía mundial.
