México crecerá 5.5% en 2021, pero no es para echar las campanas al vuelo
Los riesgos asociados a la pandemia se mantendrán como algunos de los principales desafíos para México y el mundo.
La agencia calificadora Moodys Investor Services anunció un incremento de su expectativa de crecimiento para nuestro país en este año. Para 2021 el PIB del país crecerá 5.5 por ciento desde un dato previo estimado de 3.4 por ciento que había fijado en agosto pasado.
El impulso económico estará particularmente sustentado en una gran tracción que se espera en nuestro principal socio comercial y primera potencia global, Estados Unidos, una vez que inicie en forma la aplicación del segundo gran paquete de estímulos fiscales que se espera será de cuando menos 1.5 billones de dólares.
En conferencia de prensa, la analista para México de Moodys, Ariane Ortiz-Bollin, fue muy enfática al señalar que una tasa mayor de crecimiento no dice mucho, no es un reflejo plenamente confiable, de las condiciones económicas del país, así como no lo fue en su momento el desplome de 8.5 por ciento que experimentó el PIB de México el año pasado.
De lo que se trata, es de un “rebote” económico, lo que no significa el fin de los problemas que asolan a la economía mexicana, estos se mantendrán y deben solucionarse.
Factores de riesgo como por ejemplo la contrarreforma eléctrica, pueden inhibir la confianza y la inversión en nuestro país. Este último factor, el de la electricidad, puede traducirse en un menor crecimiento económico y con el tiempo, podría incluso determinar un ajuste en la calificación de México.
Estados Unidos, la esperanza de México
La economía de Estados Unidos repuntará significativamente este año, especialmente a partir del segundo semestre, lo que impulsará también a nuestro país. De hecho, será gracias a nuestro vecino del norte que México tendrá un crecimiento mayor a lo esperado. Este país crecerá gracias al impulso fiscal que es inminente, por caso 2 billones de dólares, también por el avance del proceso de vacunación, y un entorno político más estable una vez pasada la tormenta generada por la elección presidencial y la negativa a reconocer los resultados por parte del entonces presidente Trump.
Estados Unidos es la esperanza de México para que nuestro país crezca más allá de lo pronosticado, incluso por las propias autoridades hacendarias mexicanas, que prevén un PIB de 4.6 por ciento para este año. Sin ese incremento que provendrá del sector externo, nuestro país tendría problemas adicionales de crecimiento, como de hecho los tiene.
Nivel pre-pandemia hasta 2022
Los niveles de indicadores económicos que teníamos previos a la pandemia, es decir los del año 2019, los veremos en el mejor de los casos hasta finales del año 2022, no antes. Aunque en este año la economía mexicana tenga un mucho mejor año, con una tasa pronosticada por Moody’s de 5.5 por ciento en el PIB, no es para echar las campanas al vuelo porque eso no significa que no habrá riesgos en la economía mexicana ni que se haya iniciado un ciclo virtuoso; tanto así, que en 2022 este mismo indicador se colocará apenas en 2.6 por ciento, ligeramente por arriba del potencial de crecimiento que registraba nuestro país antes de la pandemia.
Moody’s aseguró que los efectos económicos generados por la pandemia del Covid-19 se mantendrán como algunos de los principales desafíos para el mundo entero, no solamente para nuestro país; anticipó un crecimiento de 5.3 por ciento para las economías que conforman el G-20, pero dicha tasa bajará a 4.5 por ciento en 2022 y después regresará a la dinámica de los años previos a la pandemia, ligeramente arriba de 2 por ciento.
El camino hacia la recuperación es todavía muy largo, en el caso de México éste camino depende mucho de lo que suceda en Estados Unidos y de cómo la economía reducirá los riesgos que tiene previos a la pandemia así como los que se generaron con esta.
