¿La guerra comercial de EU y China se mantendrá en el largo plazo?
Muchos impactos todavía no se conocen para los mercados y economías, pero estos factores nos dicen que la guerra comercial se mantendrá por un largo plazo
La guerra comercial entre Estados Unidos y China será de largo plazo, pasará por etapas como la que vivimos actualmente (aplicación de mayores aranceles por parte de Estados Unidos a China), y generará episodios de incertidumbre global debido a que existen diversos factores que en cierta forma se conjugan para que el conflicto no termine tan pronto como el mundo lo desearía.
Estos son algunos de los factores que para diversos analistas de México y de otras partes del planeta permiten anticipar una guerra comercial de muy largo plazo y en la que al final existe la posibilidad de que no se registren ni vencedores ni vencidos.
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Factores políticos
Estados Unidos: Donald Trump trabaja por y para su reelección; si llegó a la presidencia con la promesa de regresar a Estados Unidos los miles de trabajos que, según él, se fueron de Estados Unidos por prácticas comerciales desventajosas de otros países, difícilmente dejará de estar presente en este tema.
Al respecto, dos países son clave para lograr el apoyo del electorado, uno de ellos es China, que en efecto le ha quitado a Estados Unidos una parte del protagonismo mundial, colocándose ya como la segunda mayor potencia del planeta. Se trata de una guerra por la supremacía industrial, ese es en el fondo el punto relevante, en el que están en juego miles o quizás millones de empleos. Donald Trump no quitará el dedo del renglón. El otro país que mucho le “servirá” a Trump será México, con el tema migratorio, claro que en su debido momento.
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China: Xi Jinping es hoy uno de los hombres más poderosos del mundo y su influencia en China es notoria, el equilibrio geopolítico mucho depende de este funcionario del partido comunista chino convertido en presidente de la segunda economía del planeta. Pero las presiones internas por la marcha de la economía no dejan de sentirse. Aunque en lo económico China es muy abierta, en lo político el férreo control es evidente. Sin embargo, se sabe de los juegos palaciegos para sustituir a Jinping antes de que concluya su mandato, que al parecer termina en 2023. Una guerra comercial con la nación más poderosa del mundo ha puesto a prueba el liderazgo interno del presidente chino.
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Factores económicos
1) Como señalamos, el fondo de la disputa es por la supremacía del sector industrial; son miles de millones de dólares los que están en juego, solo el sector de la robótica China invirtió en 2017 alrededor de 150 mil millones de dólares para su desarrollo, el valor del mercado es inmenso según los analistas y bien vale la pena una guerra comercial por larga que esta sea.
2) El valor de otros mercados de las cadenas productivas también son muy elevados; se estiman que solamente en naciones como Singapur, Malasia, Indonesia e incluso Japón, el impacto económico sería de entre 300 y hasta 500 mil millones de dólares dependiendo del sector involucrado.
3) Se estima que el impacto de la guerra comercial en el PIB de las naciones involucradas sería de entre 0.25 y 0.50 por ciento, dependiendo de las medidas adoptadas; es un efecto considerable, igualmente son miles de millones de dólares, pero es probable que los dos países estén dispuestos a sacrificar crecimiento económico por un rato. China crecerá este año entre 6 y 6.5 por ciento, mientras que Estados Unidos lo hará a una tasa de entre 2.5 y hasta 3.0 por ciento. El problema será para el resto del mundo, que también reducirá sus expectativas de crecimiento.
Factores geopolíticos
1) Sabemos de la supremacía geopolítica de Estados Unidos, no hay mucho más que añadir al respecto más que, evidentemente, la quiere mantener.
2) China ha visto amenazada en los años recientes su expansión en diferentes sectores industriales tanto por las limitaciones que le impone Estados Unidos como por el crecimiento de otros países que avanzan a pasos agigantados por iniciativa propia y por el apoyo de otras naciones, entre ellas Estados Unidos, para cerrar el paso al gigante asiático. Uno de esos países es la India, nación que tiene un sector industrial tan desarrollado que se considera que hoy ya podría retar a China.
Como siempre, el juego tiene un signo, el de los dólares, miles y miles de millones que para los expertos es razón suficiente para aconsejar a los inversionistas que tomen una silla y se sienten a ver una función de larga duración en la pantalla.
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