Expectativas de PIB empiezan a declinar en México, y en el mundo
El crecimiento del PIB seguirá atado a los efectos de la pandemia; todo indica que solamente Asia logró controlar el virus y sus efectos en la economía.
La inacabable pandemia del coronavirus que padece la economía mexicana, que no se ha aplanado desde que inició; sus efectos negativos desde el año pasado y de manera inevitable cuando menos en la primera mitad de este 2020; la difícil cuesta para la recuperación plena, que al parecer no llegará antes de 2024, más un sinnúmero de factores que se combinan para un panorama incierto, han provocado que las expectativas de crecimiento del PIB para este año se vayan modificando paulatinamente a la baja, en el sector privado.
Pero la tendencia no es exclusiva del país, se trata de un problema casi global, como es el caso de Europa en donde sí se aplanó la curva de contagios generados por la pandemia durante algunos meses del año pasado, pero una segunda ola empieza a provocar que los agentes económicos ya no sean tan optimistas respecto a la recuperación del crecimiento esperado para el año en curso, aunque todavía dentro de márgenes positivos.
México, frágil recuperación
La recuperación de la economía mexicana será frágil en este año y no con grandes expectativas de crecimiento; de hecho, en el promedio de los análisis elaborados por el sector privado el PIB esperado para este 2021 se encuentra más cercano a 3 por ciento, que al 4 por ciento pronosticado por el gobierno (la tasa pronosticada es incluso superior, de 4.6 por ciento).
Muchos factores juegan todavía en contra; pero justamente el escenario de baja inversión privada es uno de los que más preocupa a los analistas, ya que consideran que la inversión pública por sí misma será insuficiente para reimpulsar a la segunda mayor economía de Latinoamérica.
Como sabemos, el año pasado el PIB del país habría caído entre 9 y 10 por ciento; por lo que incluso en el supuesto de que se lograra la tasa de crecimiento del PIB proyectada por el gobierno, sería apenas la mitad del desplome del año previo; haría falta un esfuerzo adicional para volver a crecer a una tasa similar en 2022 y de esa manera hablar de que la economía del país llegó a los llamados niveles prepandémicos. Pero, en los años recientes México no ha logrado superar la tasa media de crecimiento de apenas 2.5 por ciento, no se ve cómo pueda crecer al doble.
Desde luego la baja inversión pública no es el único ni el principal problema de la economía mexicana, aunque sí uno de los más importantes. En este contexto los análisis hablaban a finales de 2020 de un PIB cercano al 3.5 por ciento, pero al cierre de los primeros 15 días del año ya se habla de un nivel de 3 por ciento.
Si crecemos a esa tasa, de 3 por ciento, llegaremos a donde estábamos antes de la pandemia hasta 2024, sin considerar que en el año 2019, es decir, el año previo a la crisis sanitaria, la economía mexicana también decreció.
Economía global seguirá afectada por Covid, al menos en primer semestre
En Europa la situación es similar, o peor. A inicios del año economías como la de España, Italia, Francia, Alemania e Inglaterra, anticiparon crecimientos más o menos importantes; por ejemplo, en el caso de España se esperaba un repunte aproximado de 8 por ciento o superior; pero los analistas privados calculan que en el mejor de los casos crecerá al 4 por ciento, o menos. El resto de las naciones tienen más o menos la misma tendencia.
En Europa viven la segunda o tercera ola de contagios de Covid, según la nación de que se trate; lo anterior más la posibilidad de nuevos confinamientos (en países como Alemania de hecho ya son una realidad), y la serie de restricciones que frenan la economía, ha empezado a desplomar las expectativas del PIB para este año, todavía dentro de márgenes positivos, con tasas que en otras épocas serían incluso espectaculares, pero que con las condiciones actuales son apenas una fracción de la caída que tuvieron en 2020.
Asia es quizás la única región en el mundo que al menos hasta el momento se mantendrá con mayor y más sólido crecimiento económico en 2020, pero no podrá impulsar a toda la economía global, eso es un hecho.
EU, la esperanza para México
La gran esperanza para México es su vecino del norte, la economía más grande del mundo. Este martes 20 de enero inició una nueva era política y económica en ese país. En lo económico los mercados y el mundo entero están pendientes del gigantesco paquete de estímulos por hasta 1.9 billones de dólares que avanza en el congreso y con la administración que está a unas horas de tomar el mando de la economía número 1 del planeta.
Este gigantesco paquete económico será un gran impulso, al menos en un inicio, podría significar un elemento decisivo para el PIB de ese país.
Aunque de frente seguirán los problemas sanitarios heredados por una pésima gestión que ha dejado millones de contagiados y que tiene como expectativa la muerte de casi medio millón de personas al cierre de enero.
El apoyo económico esperado también podría beneficiar a México, es de hecho una gran esperanza para nuestro país por el esperado repunte de la demanda y el consumo estadounidense. Este podría ser un elemento que ayude a nuestro país y acercarse más a la tasa del PIB proyectada por el gobierno. Pero, también depende de muchos factores y no es lo más sano depender eternamente del vecino; mientras tanto, las expectativas hablan de un difícil primer semestre para el PIB de nuestro país, y lógicamente empiezan a declinar.
