Del estancamiento a la contracción; empeoran previsiones del PIB
El dato de la actividad económica en noviembre hizo que varios analistas redujeran sus estimaciones del PIB para 2019 y 2020.
El débil dato sobre la actividad económica en noviembre pasado, reportado hoy por el Inegi, hizo que varios analistas consideraran que el PIB de México cerrará con contracción en 2019 y un deterioro de las expectativas en 2020, debido al consumo privado menguante, escasa inversión pública y desconfianza del sector privado en las políticas del gobierno.
El Índice General de Actividad Económica (IGAE) creció un 0.1% en noviembre frente a octubre, ayudada por un avance en el sector secundario que ayudó a compensar el retroceso de las actividades primarias y el estancamiento del comercio y los servicios, dijo el instituto nacional de estadística INEGI.
El sector agrícola cayó un 2%, mientras la actividad industrial creció un 0.8% y las actividades terciarias no mostraron variación en cifras ajustadas por estacionalidad.
Respecto al mismo mes de 2018, la actividad económica retrocedió un 1.2% en noviembre, la segunda disminución a tasa anual seguida en datos originales y la sexta de 2019. En cifras desestacionalizadas. Sin embargo, la caída fue de -0.8% para sumar siete meses consecutivos sin avance, según el INEGI.
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Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base, dijo en un reporte que “la publicación del IGAE incrementa la probabilidad de que en el cuarto trimestre el PIB (Producto Interno Bruto) haya mostrado una contracción moderada, llevando al promedio anual del 2019 a mostrar una disminución”.
“La economía mexicana se mantiene inmersa en una fase de recesión: siete meses de variaciones anuales negativas y la tendencia de su ciclo a la baja hacen patente la necesidad de instrumentar una estrategia de reactivación económica contingente”, dijo el economista José Luis de la Cruz, director del centro de estudios IDIC.
“La mayor molestia de la IP es la política energética”
Por su parte, Barclays rebajó drásticamente su estimación de crecimiento del PIB para 2020, de un 1.4% previo a un 0.6%. Mientras que para 2019, espera que la economía se haya contraído -0.1%.
La falta de cambios en la dirección de la política energética parece ser el factor principal detrás de la baja inversión y la demanda local, aunque la demanda externa puede proporcionar una compensación parcial.
En una nota a inversionistas, Barclays indicó que la falta de cambios en la dirección de la política energética parece ser el factor principal detrás de la baja inversión y la demanda local, aunque la demanda externa puede proporcionar una compensación parcial.
“Parece improbable que la administración López Obrador cambie pronto la política energética y continuará impulsando una visión nacionalista sobre el petróleo y la electricidad, que en nuestra opinión, ha sido la principal causa del malestar del sector privado”, agregó.
La oficina del banco inglés espera que las exportaciones permanezcan como un motor que impulse el poco crecimiento del país durante el año.
El dato del Producto Interno Bruto de 2019 será publicado por el Inegi el jueves 30 de enero.
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Con información de Reuters.
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