7 cosas que debes saber sobre el proyecto de Presupuesto de Egresos 2021
No por ser un ejercicio de gasto deja de ser un detonante para el desarrollo si se reorienta con una visión diferente, pero se sigue la misma tónica de al menos el último cuarto de siglo.
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021 es, una vez más, un programa enfocado en el gasto, como prácticamente todos los que se han presentado en al menos un cuarto de siglo. La escasez de recursos es la constante y, más que los ajustes al gasto, destacan los reacomodos que se hacen de acuerdo a las prioridades del gobierno en turno, el proyecto para 2021 no es la excepción.
Estos son algunos de los elementos más importantes detectados en un primer análisis, en el que efectivamente se cumple lo dicho un día antes por el Secretario de Hacienda y Crédito Público, en el sentido de que la pandemia modificó todo en el país, incluyendo el presupuesto.
1. Será aprobado sin casi correcciones
La mayoría de Morena en la Cámara de Diputados, instancia que deberá autorizar el proyecto presentado ayer por el ejecutivo federal, hace casi inevitable que se mantengan los mismos datos y que las correcciones que lleguen a proponerse sean mínimas. Es decir, es casi un hecho que el presupuesto pasará tal cual. Lo anterior tiene su parte positiva y negativa; en el primer caso se evitará la incertidumbre económica-financiera en caso de una dilación para la aprobación del presupuesto, de la que ya tuvimos bastante este año; en el segundo caso, cualquier mejora que se pudiera hacer está casi descartada.
2. La economía del país crecerá solamente si la pandemia se controla
Esto lo afirmó Arturo Herrera, encargado de las finanzas públicas del país en las que dimensiona, sin querer, o quizás con todo propósito, el impacto que dejó esta crisis sanitaria en la economía del país. Sin olvidar que México ya estaba en recesión antes de la pandemia, es decir, justo la economía mexicana pasaba por problemas que se agravaron cuando llegó el Covid-19
3. Tres prioridades
De acuerdo a lo presentado ayer por el secretario de Hacienda ante los diputados, el orden de prioridades del gobierno federal para el ejercicio del gasto el año 2021 queda de la siguiente manera: Gasto social, salud e infraestructura.
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4. Inversión solo a obras insignia de gobierno
De los tres rubros anteriores, solamente el último podría considerarse como dirigido a la inversión y el consecuente impulso al desarrollo económico, salvo por el hecho de que los recursos se destinarán en un gran porcentaje a las obras insignia de la actual administración. Así, para continuar las obras del Tren Maya se pidieron 36 mil 288 millones de pesos para 2021, mientras que para las obras del Aeropuerto Felipe Ángeles en Santa Lucía la partida presupuestal requerida será de 21 mil 315 millones de pesos. No hay otros programas de infraestructura más ambiciosos que pudieran detonar el crecimiento económico.
5. Los programas sociales con más presupuesto
Como señalamos, el gasto social es nuevamente la mayor prioridad presupuestal; el objetivo es loable sin duda alguna, pero eso orienta invariablemente el presupuesto federal a un ejercicio de gasto, igual que los de los últimos 25 años, y no de gasto para el desarrollo, dejando muy poco espacio, o de plano ninguno, para el impulso al crecimiento.
Así, el Programa de Pensión para Adultos Mayores vuelve a colocarse como el que más dinero del presupuesto orientado al gasto social acapara con 135 mil millones de pesos para 2021, la cifra es equivalente a la tercera parte de todos los recursos destinados al gasto social y a los proyectos de infraestructura.
Para becas a nivel superior se pide destinar 33 mil 172 millones de pesos, para nivel básico 31 mil 937 millones, para el Programa Sembrando Vida se destinarán 29 mil millones de pesos en caso de aprobarse el proyecto presentado, mientras que el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro tendría recursos por un total de 20 mil 600 millones de pesos para el año siguiente.
6. Escenario optimista de la SHCP
En el que debe ser su papel, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) esbozó un escenario más optimista para 2021 del que se maneja en los diferentes medios informativos, al menos en la mayoría, y diferente a las expectativas que tienen analistas nacionales e internacionales del sector privado, por lo que no necesariamente se cumplirá.
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Por ejemplo, señaló un objetivo de crecimiento de 4.6 por ciento del PIB para 2021, cuando el promedio de los analistas ubican una tasa de 3 por ciento. Ubicó el nivel del tipo de cambio en un promedio de 22.10 pesos por dólar, pero el promedio en el mercado es de 22.5 pesos. El barril del petróleo lo ubicó en 46.1 dólares, aunque algunas expectativas esperan un promedio de 43 dólares, y fijó una meta de producción para Pemex de 1.857 millones de barriles diarios de petróleo, pero los análisis privados consideran que Pemex tendrá el año siguiente un promedio de producción diaria de 1.75 millones de barriles.
7. Sin incentivos a iniciativa privada
Es ya prácticamente un hecho que en este sexenio no habrá apoyo alguno para la iniciativa privada, no se presentó antes de la pandemia y en este proyecto de presupuesto cuando muchas empresas fueron golpeadas, tampoco se considera, la iniciativa privada tendrá que “rascarse con sus propias uñas“. En materia de recursos para apoyos fiscales para mitigar el impacto de la pandemia, o programas de apoyo financiero para micro y pequeñas empresas, el monto presupuestado en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021 será de: cero pesos con cero centavos.
Las empresas, sobre todo las micro y pequeñas, en donde se desempeña gran parte de la actividad laboral del país, que generan alrededor del 80 por ciento de los empleos, no tendrán ningún tipo de apoyo, el Presupuesto de Egresos no sólo puede ser considerado y utilizado como un ejercicio para gastar, de la forma en la que se oriente podría ser detonante para el desarrollo, no ha sido el caso desde hace varias décadas y no lo será ahora.
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