Dos ovejas le quieren enseñar inglés a tus hijos
Existen métodos más afectivos para acercar a los niños desde los dos años al idioma inglés que va más allá de sentarse en un pupitre.
Shaun & Timmy son un par de ovejas de piel negra y pelo blanco. De ojos grandes y redondos como platos, orejas alargadas y colgantes, estos habitantes de un universo granjero en Stop Motion son los principales aliados de un revolucionario sistema de enseñanza para el inglés.
Así es como, a través de un maridaje de realidad y animación, British Council, brazo cultural de la Embajada Británica, busca acercar el idioma a los más pequeños.
“No sólo se trata de crear una clase, sino de generar un pequeño mundo fantástico en donde los niños vienen a jugar y ahí sucede el aprendizaje, es decir, se da a través del juego”, dice Manuel Giménez, director global de mercadotecnia del programa Learning Time with Shaun & Timmy, el cual ya se ofrece en México.
En las oficinas centrales de British Council, en Polanco, Giménez, un hombre delgado, sonriente, de cabello largo sujetado en cola de caballo y colección de piercings en su rostro, habla de este método lúdico, cuya intención es conquistar a los niños a partir de los dos años.
El objetivo es que los pequeños adquieran la lengua, no que la aprendan, explica Giménez.
“Tratamos que los niños absorban el inglés en el momento en el que se adquiere el idioma, de los 2 a los 6 años.
”La gente normalmente aprende inglés cuando ya domina el español, esto limita, por ejemplo, la obtención natural de múltiples sonidos. Es una serie de procesos que tratamos de saltarnos”, apunta el directivo.
Los creativos de British Council anticiparon una problemática obvia de ofrecer un producto educativo para pequeños que, en algunos casos, todavía no hablan o están en el proceso de las primeras palabras.
De ahí que hayan acudido al estudio británico Aardman Animations (Pollitos en Fuga, Wallace & Gromit, Piratas!),para desarrollar un curso que garantizara la interacción entre los niños, profesores y los personajes ficticios. Así se acordó que Shaun y Timmy serían estos guías, personajes creados bajo la técnica de Stop Motion, la cual ha distinguido la filmografía de esta casa productora.
“Para completar la experiencia, se desarrolló un ambiente en el salón de clases que trata de emular el entorno en el que viven estos personajes, es una granja con la que se logra un poco más de empatía”, comenta Giménez.
Lo que apuntala, finalmente, el proceso, es la técnica: el desarrollo holístico, filosofía que se pretende aplicar en este esquema.
Esta doctrina, que considera la importancia de explicar el “todo” a través de la relación de cada una de las partes, en lugar de basarse en la idea tradicional de que los elementos son más bien una suma que se puede fragmentar o dividir, implica que los niños se desarrollan bajo un proceso que involucra ámbitos como el cognitivo, social, cultural, físico, emocional y espiritual.
Por eso, en el programa Learning Time el salón evoca una granja donde viven personajes animados, los niños no se sientan en un aburrido pupitre y asisten a un juego, las medidas de seguridad están predispuestas para los pequeños y el maestro resulta un vínculo entre el desarrollo y el aprendizaje, más que un repetidor de lecciones.
El curso tiene su sede en México en la zona de Interlomas, mientras que, en el orbe, se han abierto locales especializados para el programa en Chile y Singapur.
En el caso de México, el sistema es una alternativa que busca la efectividad en un país en el que el inglés es una de las tantas materias pendientes en educación, no sólo para los alumnos, sino también para los profesores que lo imparten.
De acuerdo con el Examen de Uso y Comprensión del Idioma Inglés aplicado a un grupo de maestros de educación básica, el 14.7 por ciento tiene un desconocimiento total de la lengua y el 23.8 por ciento presenta el nivel de inglés esperado para los alumnos de cuarto de primaria.
“El inglés es el idioma mundial de los negocios, lleva siéndolo mucho tiempo. Ahora, con el nivel de conectividad y acceso de comunicación, la mayor parte del contenido está en inglés. Lo cierto es que el hablarlo pasó de ser una ventaja competitiva al hecho de que no hablarlo ahora es una desventaja competitiva. Es decir, antes era un plus y ahora es un must.
“Antes, cuando íbamos a pedir una chamba, el empleador decía ‘guau, hace todo esto y además habla inglés’, pero si hoy dominas un montón de cosas, pero no hablas inglés, entonces ni siquiera van a leer tu currículum”, contrasta Giménez.
British Council ha lanzado recursos adicionales para el Learning Time with Shaun & Timmy apoyado en las nuevas tecnologías: en iOS y Android están disponibles apps de juego para reforzar el aprendizaje, y de forma temporal se subió un MOOC (Massive Open Online Curse), que democratiza el acceso parcial al método.
