Amanali, un paraíso para vivir y divertirse en grande
En Tepeji del Río, Hidalgo se encuentra Amanali, un concepto residencial, campo de golf y club náutico que ha formado una gran comunidad de familia y amigos.
Hugo Burgos es un empresario oriundo de Tula, Hidalgo que tuvo la visión junto con Jorge Quinzaños de crear hace 13 años Amanali Country Club & Náutica, un desarrollo que se encuentra en Tepeji del Río y que sobresale su arquitectura y campo de golf (el número 10 del país).
Se trata de un gran desarrollo localizado a 40 minutos de la Ciudad de México que conjuga belleza natural del entorno, el clima y el diseño de vanguardia del afamado urbanista Mario Schjetnan que, junto con la más alta calidad en la infraestructura, constituyen la combinación perfecta para hacer de Amanali Country Club & Náutica un concepto único de exclusividad accesible.
El desarrollo cuenta con un campo de golf, diseñado por Schmidt & Curley, una prestigiada firma internacional de arquitectura y planificación, mientras que la Casa Club es creación de Legorreta Arquitectos.
Además de constituirse como el lugar ideal para descansar, este desarrollo también se erige con atractivos planes de inversión y plusvalía ya que cuenta con lotes residenciales con excelentes vistas y hermosas casas panorámicas.
El Error de diciembre
Hugo Burgos estudió administración de empresas en la Universidad Iberoamericana y en la Universidad de Harvard. Tiene un MBA con especialización en finanzas por la Universidad de Texas y trabajó para Goldman Sachs y Operadora de Bolsa.
Aunque hizo su vida en la Ciudad de México, decidió comprar un terreno de ocho hectáreas junto a la presa Requena con la idea de hacer un rancho. “Le platiqué del terreno a Jorge Quinzaños, amigo mío de toda la vida. Él también fue ‘casa bolsero’ durante 15 años y socio fundador del Club de Golf Malinalco. Fuimos a ver las parcelas y había otras 12 hectáreas y decidimos comprarlas”, cuenta Hugo, quien es presidente de Amanali Country Club & Náutica.
Era la década de 1990 y en el proceso de la compra estos empresarios se enteraron de que ejidatarios de la región querían vender 300 hectáreas. “Negociamos con ellos el precio de sus tierras y cuando les terminamos de pagar vino el ‘Error de Diciembre’ en 1994 en los primeros días de la presidencia de Ernesto Zedillo. La inflación se fue a más del 100% y las tasas de interés eran del 150%. No había ninguna posibilidad de hacer algo con esos terrenos y los dejamos ‘dormir’ durante 15 años”, recuerda Burgos, entrevistado por Alto Nivel.
El comienzo de un sueño
En 2008 fue cuando Hugo y Jorge empezaron a mover la tierra que habían comprado en los años 90; e iniciaron un proyecto de aproximadamente 350 hectáreas que hoy es Amanali, donde se lleva a cabo el Torneo Italia Ferrari desde hace cinco años.
“Empezamos a invertir en un cerro precioso con una vista sensacional a un lago de mil hectáreas llamado la presa Requena, rebautizada como Amanali Lake. Al principio parecía que estábamos enterrando el dinero porque gastábamos y no veíamos nada concreto. Después de un año empezamos a ver resultados y en 2009 lanzamos la preventa”, relata el entrevistado.
Los dos empresarios empezaron a vender los lotes con el prestigio que ambos tienen como inversionistas y ‘casa bolseros’. Ambos son conocidos en el sector inmobiliario y financiero. “Solo había dos mesas con bancas en lo que hoy es la entrada de Amanali. Teníamos un mapa y decíamos: ‘Aquí va a haber una calle’, ‘aquí va a estar el hoyo uno, el hoyo dos, etcétera’. Primero les vendimos a nuestra familia, amigos y conocidos alrededor de 50 lotes con lo cual ya recuperamos la inversión. Así arrancamos”, recuerda.
Al principio la gente compró muy barato (75 dólares en ese entonces, contra 300 dólares el metro cuadrado actualmente) y construyeron tres hoyos del campo de golf (hoy suman 18). Además, construyeron su primera de dos casas clubs que tiene el complejo. Amanali también cuenta con un helipuerto y para 2023 planean hacer un hotel y más adelante 9 hoyos más.
Una comunidad para alejarse de las crisis
La segunda Casa Club fue diseñada por Legorreta + Legorreta con canchas de tenis y pádel tenis, cancha de fútbol, alberca panorámica, vestidores y baños con vapor, sauna y salas de masaje, chapoteadero, jacuzzi, playa de relajación, gimnasio, ludoteca, salón de juegos, juegos infantiles, areneros, ajedrez monumental, ping pong, brincolines, hermosos jardines, entre otros.
También cuenta con el restaurante Los Espejos y el bar El Pirul; y con la disponibilidad de eventos privados.
“En 2020 llegó la pandemia por el COVID-19 y decidimos consultar con el gobierno estatal si debíamos cerrar el club y nos dijeron que jugar golf era algo muy personal. Nos mandaron a alguien de protección civil y solo nos dejaron abierto el campo de golf y las canchas de tenis”, recuerda Burgos.
Hoy lo mejor de Amanali es la gran comunidad que se formó a raíz de la pandemia pues las familias vivían ahí de tiempo completo y empezaron a convivir y a divertirse en grande. Incluso, invitaron amigos que no habían salido por el encierro y algunos de ellos también compraron terrenos. Así que, el 2020 y 2021 fueron dos años muy buenos en ventas.
“Puedo decir con mucho orgullo que no despedimos a nadie durante la crisis sanitaria por el COVID. Tenemos alrededor de 600 empleados. Llegamos a negociaciones de ajustes salariales que duraron unos meses y luego regresaron todos al 100% de su sueldo”, explica el empresario.
Un lugar para divertirse en grande
Amanali está ecológicamente planeado con lotes residenciales de excelentes vistas y hermosas casas de vistas panorámicas. Ofrece atractivos planes de financiamiento, membresías para el uso del club, planes de inversión, seguridad y servicios de primera calidad.
El club náutico tiene una capacidad para resguardo de lanchas privadas, parque acuático, tirolesa, muro de escalar, pista de esquí acuático, snack bar, área de picnic, playa de relajación, hamacas, brincolín, cancha de petanca, cancha de voleibol de playa, sendero para correr junto al lago, juegos infantiles, kayaks, tablas de stand un paddle y marina seca para guardado de lanchas privadas.
Una inversión inteligente
Amanali es un negocio muy exitoso, pero la reinversión sigue. Hasta ahora han vendido alrededor de 1,200 lotes y están disponibles más para familias que quieran sumarse a esta comunidad.
El gran de reto es continuar con la venta de 400 lotes de primera calidad, reconoce Hugo. A finales de este año harán la preventa y la venta normal será a principios del 2023. ¿Otros desafíos? Mantener el club lleno de gente contenta como hasta ahora y lograr un mayor aprovechamiento de las instalaciones, así como conseguir que haya más torneos de golf, celebraciones empresariales, bodas, cumpleaños y eventos.
