Buscador
Ver revista digital
Actualidad

¿Es posible vender o concesionar el Parque Bicentenario de la CDMX?

13-08-2018, 3:33:20 PM Por:
© Especial Parque Bicentenario.

Desde finales de 2017, la Semarnat ya no administra el área de 55 hectáreas que integran al Parque Bicentenario, que constituye el segundo pulmón de la capital del país.

Todos los bienes nacionales pueden ser enajenados o concesionados a particulares, siempre y cuando exista un motivo de hecho que lo justifique y la operación esté contemplada en la ley. Esto es lo que podría ocurrir con el parque bicentenario de la Ciudad de México, que dejó de ser administrado por la Secretaría del Medio Ambiente desde finales de 2017.

El área, que cuenta con 55 hectáreas, hoy está a cargo del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (INDAABIN), un órgano desconcentrado de la Secretaría de la Función Pública, cuyas atribuciones principales son controlar, proteger, adquirir y enajenar los inmuebles propiedad del gobierno federal.

Justo por las funciones de esa dependencia, vecinos de la zona temen que el parque bicentenario pueda ser transferido a la iniciativa privada, aunque para ello se necesitaría cumplir con varios requisitos, que te mostramos a continuación.

  1. Hazaña ecológica

El parque, ubicado al poniente de la capital mexicana, originalmente era una refinería de la empresa El Águila, cuya operación inició en 1933. Cinco años después formó parte de la expropiación petrolera realizada por el presidente Lázaro Cárdenas. Desde entonces el inmueble formaba parte del patrimonio productivo de Pemex.

Convertida en la refinería 18 de marzo, que producía gasolina, turbosina, diesel y gas licuado, el área fue severamente contaminada hasta 1991, fecha en la que concluyeron sus operaciones como parte de un programa de recuperación ecológica del entonces Distrito Federal.

Desde 2007 el predio fue donado por Petróleos Mexicanos a la Semarnat, que invirtió alrededor de 2,000 millones de pesos en un ambicioso programa de remediación y saneamiento ambiental.

De hecho, la limpieza del suelo y del subsuelo del predio se dividió en dos etapas, a fin de eliminar por completo la contaminación dejada por los hidrocarburos producidos ahí durante 58 años.

La construcción del parque, en conmemoración del bicentenario de la Independencia del país inició en mayo de 2007, y concluyó con su inauguración el 8 de noviembre de 2010.

  1. Un pulmón “improductivo”

Una investigación del diario Reforma reveló que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) cedió la administración del parque bicentenario al INDAABIN, por considerar que el inmueble es “ocioso e improductivo”.

El rotativo asegura que vecinos de la zona, y la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros, han alertado sobre la posibilidad de que el parque sea transferido a la iniciativa privada para la construcción de edificios.

Incluso, el expresidente Felipe Calderón, cuya administración estuvo a cargo de la limpieza y reconversión de la zona, expresó en su cuenta de Twitter que “sería gravísimo ceder el parque a intereses de constructores”.

A su vez, un grupo de ciudadanos inició una petición en la plataforma Change, a fin de llamar la atención sobre la posibilidad de que una parte del predio sea privatizada.

“El parque bicentenario representa desde hace años un espacio verde, de recreación, oxígeno y distracción de miles de familias”, apunta la petición. “Unidades habitacionales hay muchas y no es justo que la prioridad sea el dinero”, asevera la propuesta que hasta el lunes 13 de agosto contaba con el respaldo de 21,420 firmas.

  1. Enajenación factible

Los inmuebles que son propiedad de la nación, cuya administración está a cargo del Ejecutivo federal, pueden ser enajenados mediante distintas operaciones, de acuerdo con la Ley General de Bienes Nacionales y la Ley Federal para la Administración y Enajenación de Bienes del Sector Público.

Estas propiedades pueden asignarse, donarse, venderse o concesionarse a personas físicas o morales (empresas), siempre y cuando se obtenga un beneficio público en ello.

El gobierno federal puede vender sus inmuebles mediante licitaciones, subastas, remates o adjudicaciones directas, o en su defecto, puede otorgar una concesión para que el bien sea administrado o explotado por particulares.

En términos jurídicos, es factible que el parque bicentenario pueda ser enajenado a la iniciativa privada, siempre y cuando exista una justificación válida para ello. De hecho, entre las facultades del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales se encuentra proponer a la Secretaría de la Función Pública la política inmobiliaria que debe seguir la administración pública federal.

El INDAABIN también está a cargo de la planeación inmobiliaria del gobierno, a fin de lograr un óptimo aprovechamiento y preservación del patrimonio nacional.

No obstante, formalmente, la concesión del parque no está en los planes de las autoridades. En ese tenor, el secretario del Medio Ambiente, Rafael Pacciano, informó que “es totalmente falso” que el parque haya sido concesionado para construir viviendas.

En ese mismo sentido se pronunció el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales, dependencia que aclaró que el parque bicentenario “no será destinado para el desarrollo de proyectos de vivienda”, pues sigue siendo propiedad federal.

autor Periodista y abogada, especialista en análisis jurídico y de derechos humanos. Ha sido reportera, conductora de radio y editora.
Comentarios