7 razones por las que tomar un vuelo privado es mucho más seguro que abordar un avión comercial
Los vuelos privados ya no son un lujo, son una nueva necesidad con múltiples ventajas para empresas, ejecutivos y personas que necesitan trasladarse de forma segura e higiénica en plena era post-covid.
A principios de 2020, cuando se extendió la pandemia de Covid-19 y comenzaron los confinamientos, un amplio porcentaje de los vuelos comerciales fueron suspendidos para evitar contagios. Esto, sumado al cierre de fronteras y a los estrictos protocolos de seguridad e higiene en los aeropuertos, provocó que muchos vieran los vuelos privados como la mejor alternativa de movilidad para viajar de forma más segura en medio de la emergencia sanitaria.
La pandemia cambió la visión que se tenía de los vuelos privados: pasaron de representar un lujo o excentricidad, a ser una necesidad real para muchos empresarios, corporaciones, ejecutivos y hasta personas que jamás pensaron que se subirían a un avión privado.
Este servicio fue crucial en casos de repatriación de familiares, transportación de médicos, el traslado de turistas VIP y de negocios, y otras situaciones que requieren soluciones de transporte rápidas, exclusivas y ajustadas a sus necesidades.
Incluso, muchos viajeros de la clase business en vuelos comerciales se convirtieron en clientes de la aviación privada, acercándose a empresas como Patriot Aviation, que ofrece servicios de aviación ejecutiva para viajes de negocios o placer, así como ambulancia aérea para emergencias.
Los vuelos privados están en auge, ya que tienen varias ventajas en términos de tiempo, practicidad, privacidad, bioseguridad y hasta económicos.
¿Es realmente más seguro volar en un avión privado que en uno comercial?
La respuesta es sí. En términos de higiene, salud y de minimizar el riesgo de transmisión Covid-19, volar en jet particular es mucho más seguro que abordar un vuelo comercial por varias razones:
- Tienes control de los tiempos. Un vuelo privado despega a la hora que sea necesario para tus propósitos, puede hacer o evitar escalas en distintas ciudades y permanecer el tiempo que desees. Sin mencionar que te ahorras las filas para el check-in, la seguridad y la aduana del aeropuerto. La disminución de tiempo y el dominio de tu agenda implican una menor exposición a lugares y personas, por tanto, a un posible contagio.
- Menos contacto con personas. Lo que hace inseguros los aeropuertos son los millones de viajeros que entran y salen por sus puertas a diario. En estos tiempos es importante saber quién viaja a tu lado y con quien compartes espacios, algo que es prácticamente imposible en vuelos comerciales. A menudo, los pasajeros de un vuelo privado no están en el mismo espacio con extraños, ya que muchas empresas tienen sus propios hangares para despegar, o bien, cuentan con salas reservadas y aislados dentro del aeropuerto.
- Hay menos gente en la cabina. Los vuelos comerciales requieren tripulaciones numerosas para operar el avión y cuidar de los pasajeros. El lógico pensar que un avión más pequeño y con menos ocupantes, requerirá un staff menor. Al reducir el número de personas a bordo, también se reducen las probabilidades de contagio y se eleva el control sobre las medidas sanitarias.
- Es más sencillo organizar a los pasajeros. Al volar en un jet privado tienes todo el avión para ti y tu gente, no hay extraños en el interior. Aunque en un vuelo comercial puedes seleccionar tus asientos (generalmente con un cargo extra), difícilmente podrás elegir quién viaja en todos los asientos a tu alrededor. Un vuelo privado te da la libertad de sentar a los pasajeros donde y como mejor les convenga.
- Tienes más control sanitario. En un jet privado sabes exactamente cuántas personas suben al avión, quiénes son y si ya se han vacuna o hecho la prueba contra el coronavirus. También es más fácil observar medidas como la toma de temperatura, la desinfección al abordar, la sana distancia y el uso de cubrebocas.
- Un aire más limpio. Los jets privados se limpian a profundidad entre vuelos y no es secreto que el aire que se respira en los vuelos comerciales es insalubre, por las cabinas presurizadas y el reciclaje continuo. En resumen, el ambiente de los vuelos comerciales es un foco de infecciones, y en la era post-covid eso es vital. En este sentido, los aviones privados garantizan un entorno más limpio, ya que no están reciclando la respiración de, a veces, cientos de personas.
- Puede ser una inversión y hasta un ahorro. Muchas empresas e individuos aún se resisten a adoptar los vuelos privados, a pesar de tener los recursos para costearlos, pues creen que es un gasto injustificado en tiempos en que muchos enfrentan una presión financiera adicional.
Volar en privado puede parecer una extravagancia, pero si lo comparas con el riesgo de que un miembro clave de tu equipo resulte infectado con Covid-19 antes de concretar un negocio muy importante, al final puede ser más costoso y hasta provocar pérdidas a tu empresa.
Las empresas de jets particulares como Patriot Aviation ofrecen máxima flexibilidad, comodidad, control y seguridad en los vuelos.
Además de las ventajas en bioseguridad, los vuelos de esta empresa mexicana con 18 años de experiencia en el sector, tienen otros puntos a favor: están sujetos a las mismas normas de seguridad aérea y mantenimiento que los aviones comerciales, las flotas de jets privados suelen ser más jóvenes que las comerciales, no hay restricciones de equipaje y puedes organizar tu plan de vuelo ideal, así como elegir las amenidades y alimentos a bordo.
Por si fuera poco, resultan perfectos para viajes de negocios, ya que pueden funcionar como una sala de juntas aérea. Los aviones actuales ya ofrecen servicio de llamadas telefónicas e internet, ideal para adelantar juntas o algo de trabajo antes de llegar al destino.
Un vuelo privado es una de las nuevas necesidades que trajo la era post-covid, en especial para quienes no pueden o no quieren dejar de viajar, pero desean hacerlo con la máxima higiene y seguridad.
