AL pide apoyo para industrias culturales
El BID reunió a los ministros de cultura de los países latinoamericanos para discutir la importancia de la cultura en la economía regional.
21 de octubre de 2010
Luis Alberto Moreno, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, convocó a los responsables de las agencias gubernamentales de América Latina y el Caribe a discutir los desafíos y las mejores prácticas para poder incluir políticas culturales en estrategias nacionales de desarrollo.
En 2009 Latinoamérica exportó cerca de 750 millones de dólares en distintos productos y servicios culturales. Las principales fuentes de esa riqueza fueron México, Argentina, Brasil, Colombia y República Dominicana.
Moreno consideró que “las inversiones en la cultura ya no deben considerarse gastos no esenciales que pueden ser sacrificados en tiempos de dificultades financieras”.
En el caso de Argentina, las industrias culturales contribuyeron 3.5% al Producto Interno Bruto (PIB) en 2009, dijo Mónica Guariglio, directora nacional de Política Cultural y Cooperación de la Argentina, quien asistió al evento en representación del ministro de Cultura, Jorge Edmundo Coscia.
Guariglio hizo hincapié en la urgente necesidad de crear indicadores para medir el valor de la producción cultural. Esto permitiría comparar con mayor rigor la contribución de las industrias culturales con las de otros sectores y promovería una participación equitativa en la asignación presupuestaria.
Los participantes en la conferencia concordaron con la necesidad de mejorar las estadísticas en referencia a la cultura. Sin embargo, el ministro de Cultura de Perú, Juan Ossio Acuña, señaló que la tarea de crear indicadores homogéneos se complica aún más por el hecho de que algunos subsectores lucrativos, como la gastronomía, en la actualidad no están incluidos en los indicadores.
Además de la dificultad en armonizar indicadores, los sectores culturales están en distintos niveles de desarrollo en cada país. Algunos países tienen sofisticadas industrias culturales que compiten en el mercado mundial; otros aún están en proceso de identificar nichos de mercado o están enfocados en la distribución equitativa de productos culturales entre grupos excluidos o marginados.
No obstante, todos los asistentes estuvieron de acuerdo en promover la sostenibilidad de la cultura, para lo cual buscarán articularla con sectores como el turismo, la industria, el comercio, la agroindustria, la educación y la manufactura, explicó la ministro de Cultura de Jamaica, Olivia Grange.
Los ministros y representantes se comprometieron a elaborar propuestas, que serán compartidas con los ministros de finanzas, con el concurso del BID, que entiende y apoya a la cultura como una parte integral del desarrollo de la región.
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