El fin del chavismo
En Cero Demagogia, Alberto J. Bernal habla sobre cómo enfrentaría Venezuela la posible muerte de su presidente Hugo Chávez?
Me llama la atención la forma tan parca con que la prensa (la internacional y la venezolana) manejó el anuncio del ultimo viaje del presidente Hugo Chávez a Cuba. Aparentemente, el mandatario se sometería a una intensa terapia de oxigenación. Dicen los que saben que la oxigenación hiperbárica no es un tratamiento que combata el cáncer; más bien es un paliativo para hacer menos traumática la enfermedad.
Llama la atención que el presidente no pronunció alocución alguna antes de viajar a Cuba, como sí sucedió en ocasiones anteriores.
Hace unos días, el diario español ABC publicó que la razón del viaje no era seguir un régimen de oxigenación más severo, sino atender la expansión del cáncer a los huesos del mandatario. Según el rotativo español, los médicos estarían evaluando si vale la pena administrar más quimioterapia.
No soy médico, pero después de conversar con muchos conocedores del caso, me queda claro que la velocidad con la que se están viendo las recurrencias en las metástasis implican que el tratamiento no está funcionando.
Todo parecería indicar que, desafortunadamente (pues este suplicio no se lo desea uno a nadie), estamos llegando a la etapa final de la vida del presidente Chávez.
¿Qué viene para Venezuela una vez suceda lo que deba suceder? Según la Constitución venezolana, si el jefe de Estado muere antes de que inicie su nuevo periodo, el 10 de enero del 2013, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, asume el poder y estaría obligado a decretar nuevas elecciones en un periodo no mayor a 30 días.
Si Chávez asume el 10 de enero, pero fallece antes de que hayan transcurrido cuatro de los seis años de su mandato (algún día antes del 10 de enero del 2017), el vicepresidente Nicolás Maduro asume el control, pero tendría que llamar a elecciones en un periodo no mayor a 30 días. Si el presidente fallece después del 11 de enero de 2017, el vicepresidente asume las funciones hasta el final del periodo presidencial en 2019.
La cuestión constitucional es muy clara, no así la posible reacción de la burocracia chavista y de la milicia. Las encuestas muestran que Maduro, el elegido por el chavismo como su futuro líder, no le ganaría a Henrique Capriles en una eventual contienda.
¿El oficialismo chavista aceptaría transferirle sin traumatismo el poder al líder opositor? No soy optimista al respecto. Entre otras cosas, no veo bajo qué escenario el Cártel de los Soles (InterAmerican Security Watch tiene un interesante texto sobre el tema en su sitio web) estaría dispuesto a permitir que Capriles tomara la presidencia, pues la DEA tiene pruebas que evidencian que existe relación importante para comercializar narcóticos entre las FARC y una parte del ejército venezolano.
Además, ¿que pasaría con las milicias bolivarianas con Capriles como presidente? En mi opinión, la transición venezolana del chavismo hacia un modelo económico y político más lógico será complicada, pues quizás venga acompañada de altos niveles de violencia.
Pero, seamos sinceros y positivos: una Venezuela sin el chavismo es una excelente noticia en el mediano y largo plazo para el país sudamericano y toda Latinoamérica.
Si el chavismo desaparece, el socialismo del siglo XXI perderá gran parte de su relevancia y se vislumbraría un futuro más próspero para la región, entre otras cosas, porque desaparecerán despropósitos, como la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).
Puede ser…
* EL COLUMNISTA es director de Investigación de Bulltick Capital Markets,
banco de inversión especializado en Latinoamérica, con sede en Estados
Unidos. Síguelo en Twitter: @AlbertoBernalLe.
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