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El Banco Mundial aseguró que no se repetirá la crisis mundial
en alimentos experimentada en 2008 pese al alza de los precios internacionales
del maíz, la soya y el trigo en julio.
Los costos de estas semillas alcanzaron su nivel más alto
del 2012 durante el pasado mes debido al calor extremo experimentado en los
veranos de Estados Unidos y Europa.
El organismo internacional destacó en la última edición de
su Informe Alerta sobre precios de los alimentos que “los precios de los
alimentos volvieron a subir bruscamente y amenazan la salud y el bienestar de
millones de personas”.
Según el Banco Mundial, entre junio y julio los precios del trigo
y el maíz subieron 25%, los de los frijoles aumentaron 17%, mientras que los del
arroz se contrajeron 4 por ciento.
El organismo remarcó que las graves sequías elevan los
precios de los alimentos por lo que su aportación al sector agrícola en el 2012
ya supera los 9 mil millones de dólares, una de las más altas en los últimos 20
años.
El Banco Mundial destacó estar listo para ayudar a sus
países clientes con un aumento en la inversión en la agricultura, asesoría
política, financiamiento y redes de protección social en caso de agravarse la
emergencia alimentaria.
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