El mejor whisky single malta del mundo
Los mejores whiskies del mundo han surgido en Escocia y en los últimos años también en Japón, pero el mejor en 2014 es de una región lejana...
Los whiskys single malta son una bebida refinada y repleta de texturas
sorpresivas. Al beberlos, podemos apreciar notas
ahumadas, dulces y amargas que
juegan en el paladar y resultan evocativas. Un buen whisky nos transporta a
sitios nublados… nos hace pensar, por lo general, en Escocia…
Sin embargo, el título del mejor whisky del mundo de
las World Whisky Awards se lo acaba
de llevar el Sullivan’s Cove French Oak Cask, originario de la isla australiana
de Tasmania. Este lugar está
surgiendo como uno de los paraísos foodies del mundo y como un productor de cervezas, vinos y ahora whiskys
de primer orden. El clima de la isla es nublado y como es un lugar aislado al
que las autoridades no dejan que entren organismos de otros lugares (ni
siquiera del resto de Australia), los productos
son puros. El agua de los ríos
es de una pureza difícil de encontrar en cualquier lado del mundo.
Este
galardón pone en el mapa a la industria
del whisky en Tasmania, que dependerá del atractivo internacional de sus
marcas ya que el australiano es un mercado pequeño para el whisky.
Así, el Sullivan’s Cove French Oak Cask tiene un sabor ahumado con una textura suave con
dejos de canela y manzana. Lo que lo
hace diferente es la calidad de la cebada
de la isla. El precio de la botella subió de $140 dólares a más de $1,000
de la noche a la mañana. Prometemos mantenerlos informados de cómo adquirirlo
en México, aunque no sea de la barrica ganadora. Sólo se produjeron 516 botellas de esa barrica en específico
(la ya mítica 525) y todavía hay algunas disponibles en Australia.
Los ganadores de los años anteriores proceden de Escocia y Japón, y de dos casas, Ardbeg y Yamazaki. Por esto, el triunfo de Sullivan’s Cove tomó a todos por
sorpresa.
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A continuación te presentamos los anteriores ganadores del World Whisky Awards.
2013: Ardbeg Galileo de la región escocesa de Islay.
Tiene tonos de almendra, pescado ahumado y limón. Aquí, su ingeniosa campaña
publicitaria:
2012: Yamazaki 25 años de Japón. Tiene un sabor
inicial afrutado, pero la astringencia acaba con la dulzura inicial.
Aquí, un reportaje sobre la industria del whisky en
Japón:
2011: Yamazaki 1984. Al paladar evoca a un pie de
cerezas agrias y coco. El final es de un fuerte sabor a pimienta.
2010: Ardbeg Corryvreckan. Ahumado con notas de
durazno y pimienta negra.
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