Insistimos: Insuficiente la reforma energética del PRD
El plan está totalmente cerrado a la inversión privada y pretende cerrar más puertas en generación de electricidad. Sigue siendo insuficiente.
Pues eso fue todo. La propuesta de Reforma Energética del PRD, abanderada por Cuauhtémoc Cárdenas en persona, mantiene cerradas todas las puertas a la inversión privada nacional o extranjera. Es más, se preocupa por cerrar otras que ya están abiertas en materia de generación de electricidad.
El documento presentado ayer en el Monumento a la Revolución, sostiene que todo puede solucionarse con una disminución de la carga fiscal en Pemex y sacando de su Consejo de Administración a Hacienda y al sindicato petrolero.
Aquí hablamos ya hace un tiempo de los números de la paraestatal. En efecto, el gobierno federal cobró por derechos más de 900,000 millones de pesos en 2012. La propuesta del PRD es que este monto baje, según sus cuentas a razón de 30,000 mdp por año, para llegar a 150,000 mdp al año más o menos en 2018. Entenderíamos que así es, porque la redacción está un poco confusa en este punto.
En fin, lo que sea que haya querido decir, el PRD opta por quitarle a una “satánica” Secretaría de Hacienda este dinero. Como si ésta fuera un ente que no tiene nada que ver con nosotros, que funciona como un vampiro de la inofensiva paraestatal y no la deja crecer.
El problema, como ya lo dijimos hace muchas semanas, es que el dinero que se le reste a “Hacienda”, se le quita al presupuesto federal. El primer año, es decir, en 2014, tendríamos algo así como 19,000 mdp menos en el presupuesto del país. Para 2018, serían 113,000 mdp menos, es decir unos 8,700 millones de dólares menos.
¿Le alcanzaría ese dinero a Pemex para sus actividades de exploración y explotación en aguas profundas sin ninguna asociación? Es posible que de algo le sirva, pero no a la velocidad esperada. Es decir, tendría unos 25,000 mdd adicionales en cinco años, cuando la inversión total en Estados Unidos en 2012 ascendió a 185,000 mdd, según Ernst & Young, unos 130,000 mdd exclusivamente en exploración y desarrollo.
El resultado es, pues una propuesta que le da no suficiente dinero a Pemex para aumentar dramáticamente su ritmo de inversión en exploración y explotación, con lo cual no sabemos si se revertiría la tendencia a la baja en la producción del país.
A cambio, le abre unos boquetes interesantes al presupuesto federal. El gobierno tendría que bajar sustancialmente sus inversiones en infraestructura, apretarse el cinturón o bien, subir impuestos. Ah claro, pero la propuesta perredista dice que es posible subirlos de una manera “progresiva y progresista”. ¿Tú que dices?
En cuanto a la tecnología necesaria para explorar en yacimientos de aguas profundas, suponemos que el PRD va a optar por esperar a que los científicos del Instituto Mexicano del Petróleo desarrollen los conocimientos, gracias a que va a subir de 0.65 a 1% el Derecho para la Explotación Científica y Tecnológica.
Pero algo verdaderamente inquietante es que la propuesta perredista encuentra que la inversión privada en generación de energía renovable tampoco es buena. Que será la CFE la única que pueda, digamos, invertir en campos eólicos y celdas solares de forma masiva, porque si no la iniciativa privada se agandalla.
A cambio, podrá comprarle sólo generación de electricidad a pequeños productores “sociales”, que genuinamente la hayan producido para autoconsumo. Por favor lee esto y cito: “…se puede contar con una contraprestación más elevada para la electricidad procedente de fuentes de energía renovables que de fuentes de energía convencionales.”
Esto quiere decir que, con tal de que sólo sean pequeños productores los que puedan producir electricidad por medio del aire y el sol, el gobierno podría pagar más caro la luz que produciéndola con petróleo. Ah, pero no te preocupes, porque los subsidios van a seguir, aunque sólo a los “sectores y grupos sociales más necesitados” Ojo a la palabra sectores, plis.
La propuesta que abandera el ingeniero Cárdenas, pues, nos pinta a un Pemex independiente, avanzando poquito a poquito en la producción y una CFE subsidiada y pagadora de energía cara pero renovable. Eso sí, cero inversión privada en el sacrosanto campo del petróleo. Podéis ir en paz, la defensa del 18 de marzo, ha terminado. PD. Lo hemos venido diciendo: aquí no va a haber consenso y no creo que el Pacto por México sobreviva.
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