Basilea 2013, el paraguas de los bancos
El nuevo esquema legal, aplicará desde 2013 y modificará el sistema financiero como lo conocemos.
Twitter: @smilovitz
Tras la crisis del 2008, las autoridades financieras han diseñado nuevas reglas para evitar que la falta de información pueda decantar en malas prácticas de venta por parte de las emisoras de valores y los bancos. Pero también fijan nuevos requisitos de capital y liquidez para garantizar los depósitos de los ahorradores.
Carlos Pérez Gaytán (C.P.G.), director de la Práctica Regulatoria y Control Interno para Servicios Financieros en Deloitte México, explica el contexto de la regulación bancaria y Basilea III en entrevista con Elie Smilovitz (E.S.), editor en jefe de AltoNivel.com.mx.
E.S.: ¿Cuáles son las autoridades responsables de la regulación del sistema financiero en México?
C.P.G.: Existe una Ley de instituciones de crédito y varios organismos que regulan este sistema. Por una parte, está la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNVB) que es responsable de lo que podemos llamar la ‘regulación prudencial’, que incluye los índices de capitalización y riesgo, la supervisión de las agencias calificadoras y su proceso de calificación, entre otros. Por otra parte, el Banco de México se preocupa más de la ‘parte operativa’, de regular los instrumentos financieros y controlar la tasa de inflación.
E.S.: Organismos internacionales, estudios de instituciones académicas y otros agentes coinciden en la solidez del sistema financiero en México. Pero no podemos ignorar que, en las últimas décadas, la banca ha conocido algunas de las crisis más profundas en el mundo. ¿Cuáles fueron, a grandes rasgos, las causas de las crisis de 1995 y 2008, y cuál es la diferencia entre esas situaciones con la situación de estabilidad en el 2012?
C.P.G.: En 1995 una de las causas fueron los criterios, demasiado laxos, en otorgamiento de crédito, independientemente de los indicadores macroeconómicos. En 2008, hubo grandes pérdidas provocadas por instrumentos soportados en valores de alto riesgo no conocidos del todo por los inversionistas; es el caso de la hipotecas subprime. También hubo pérdidas por instrumentos muy complejos, como el caso de los derivados. Estas grandes pérdidas provocaron desconfianza y por lo tanto falta de liquidez para los bancos más débiles.
La diferencia con 2012 es que la medición de los riesgos es más profunda, los requisitos para el otorgamiento del crédito y de capitalización, más estrictos, algunos de ellos están contenidos en los acuerdos de Basilea II y III. En Basilea III algunos ejemplos son la reserva de capital y el capital estructural que deben tener los bancos para poder operar.
E.S.: ¿Qué aspectos destacaría del acuerdo de Basilea III?
C.P.G.: Basilea III establece mayores requerimientos de capital a instrumentos derivados y valores complejos, medidas de liquidez a 30 días, mayor equilibrio entre activos y pasivos a un año; así como un mínimo de índice de capitalización de 10.5% en 2019
E.S.: ¿En qué estado se encuentra la banca en México respecto a los problemas de liquidez? ¿Deben los clientes preocuparse de tener depósitos en un banco?
C.P.G.: Hay una captación estable de recursos, la mayoría de los bancos tienen liquidez. Solo hay algunos muy débiles en este renglón. Dicho esto, el IPAB es quien garantiza los depósitos de los ahorradores, hasta las 400 mil unidades de inversión, en este sentido una parte importante de los ahorradores no tienen por qué estar preocupados.
E.S.: El entorno internacional, en particular la crisis en Europa y las necesidades de capitalización de algunas de las matrices de los principales bancos suscitan preocupación en aquellos países donde la banca está mejor capitalizada. Hay posibilidad de un flujo masivo de capitales hacia el extranjero desde países como México?
C.P.G: A partir de 2008, los bancos mexicanos no pueden prestar a la matriz ni a ningún banco relacionado más del 25% del capital básico, independientemente del tipo de financiamiento.
E.S.: La falta de transparencia en la información fue, sin duda, una causa de la crisis de 2008. ¿Qué medidas se han adoptado para mejorar las prácticas de venta de productos financieros y bancarios?
C.P.G.: Las malas prácticas de venta anteriores a la crisis de 2008 tenían que ver con mayores comisiones por la venta de productos que implicaban un alto riesgo. Ahora se pide que no haya comisiones preferenciales a papeles agresivos, para que todas sean de mercado. También se propone una clasificación más minuciosa de los clientes; la regla propone que no se puedan ofrecer inversiones agresivas a clientes cuyo perfil es conservador. Respecto a la regulación de los servicios, éstos se dividen en asesorados y no asesorados, o de ejecución. En estos últimos, alguien independiente a la persona que maneja la cuenta, debe tomar nota sobre lo que solicita el cliente para que quede evidencia de qué es un servicio de ejecución. Mientras que en los asesorados, subdivididos en ‘promoción’ y ‘asesoría financiera’ propiamente dicha se establece que las asesorías deben quedar grabadas, para que exista un testimonio de lo que ofrecen los promotores de manera particular. Por otro lado, se regulan los valores. Así, si una emisora va a emitir un papel del banco al que pertenece, sólo puede colocar un 20% de ese papel entre sus clientes. Y, si es agente colocador de otra empresa, sólo puede colocar el 40% de ese papel entre sus clientes. En síntesis, lo que busca la regla es proteger a los inversionistas.
E.S.: ¿Cuál es su opinión, en una frase, sobre el futuro de la banca en México?
C.P.G.: Creo que la consolidación del sistema bancario es inminente.
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