¿Qué significa la desvinculación del salario mínimo?

El presidente Enrique Peña Nieto envió una iniciativa al
Congreso de la Unión para desvincular el salario mínimo, y. la Ciudad de México
se convirtió la primera entidad en desvincularlo de multas y otras sanciones
administrativas.

¿Qué significa esto? ¿De qué forma puede beneficiar al
ciudadano y cuál es el proceso que debe seguirse para que se transforme en una
mejor remuneración para los empleados?

“Existe una necesidad importante de aumentar el salario
mínimo. Ya no sirve para lo que fue ideado, que era asegurar un estándar de
vida mínimo para las personas, y ahora ha servido como referencia para fijar
otros precios en la economía, como multas, precios públicos, tarifas”, señala Eugenio
Gómez, profesor del área Entorno Económico del Instituto para la Alta Dirección
de Empresas (Ipade).

“Para que se use el salario mínimo para su propósito, se
encarecerían todas estas tarifas públicas y tendrían como consecuencia efectos
inflacionarios muy fuertes. La idea de la desvinculación es sensata y urgente”.

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Peña Nieto envió al Congreso la iniciativa de desvinculación
del salario mínimo como parte de una serie de medidas en reacción a los hechos
violentos en Guerrero, particularmente la desaparición de 43 jóvenes
normalistas de la Escuela Rural de Ayotzinapa.

La Ciudad de México, pionera

Si estabas acostumbrado a que cuando cometieras una
infracción en la Ciudad de México la ibas a pagar en determinadas veces el
salario mínimo, eso será cosa del pasado.

El pasado 26 de noviembre, la capital del país se convirtió
en la primera entidad en desvincular al salario mínimo de multas,
contribuciones y otras sanciones administrativas. A partir del 1 de enero de
2015 entrará en vigor la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México, que será la
nueva medida para establecer las contribuciones.

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Según el documento avalado por la Asamblea Legislativa del
Distrito Federal, la Unidad de Cuenta tendrá un valor de 67.29 pesos, que es el
valor actual del salario mínimo, y se le sumará la inflación prevista para 2015
de 3.9%, con lo cual se elevará a 69.91 pesos.

Con esta modificación, el salario mínimo se desvinculará de cuatro
códigos y 50 leyes del Distrito Federal, es decir, 281 cambios en los que
dejará de ser la medida de referencia.

La Unidad de Cuenta se deberá actualizar a partir del
primero de enero de cada año de acuerdo a lo que se establezca en la Ley de
Ingresos del Distrito Federal.

¿Y a nivel nacional?

La semana pasada, el Congreso recibió la iniciativa
presidencial para desvincular el salario mínimo a nivel nacional.

En la iniciativa, el gobierno federal contempla la creación
de la Unidad de Medida y Actualización, que ocuparía el lugar del salario como
índice, base, medida o referencia para determinar el valor de las obligaciones
y supuestos previstos en las leyes federales, estatales del Distrito Federal,
así como en las disposiciones jurídicas.

“Deben quedar claros los lineamientos para una desvinculación
eficaz. Hay que buscar un mecanismo para que el resto de las tarifas vaya
aumentando de precio, pues existe el riesgo de que después esas tarifas se
vuelva una complicación actualizarlas. Si cada año se tienen que revisar estas
tarifas y se tendrá que discutir en los congresos locales o el Congreso, eso se
va a prestar a muchas dificultades”, opina Eugenio Gómez.

Según la iniciativa federal, la nueva unidad de cuenta se
ajustará conforme al crecimiento del índice Nacional de Precios al Consumidor y
el INEGI será el órgano que publique el valor diario, mensual y anual de la
nueva unidad de cuenta. Para llevar a cabo este proceso se plantea la
modificación de los artículos 26, apartado B y 41, base II, inciso A de la Constitución.

El periodo ordinario de sesiones concluye el próximo lunes,
aunque los legisladores han abierto la puerta para un periodo extraordinario,
en caso de que las iniciativas enviadas por el presidente no tengan el consenso
antes del 15 de diciembre.

Aumento del salario, ¿siguiente paso?

Con la desvinculación del salario mínimo aprobada, el jefe
de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, busca que el salario
mínimo de los habitantes de la ciudad se eleve a 82.86 pesos en 2015, una
iniciativa que aún está en discusión.

A nivel nacional es un proceso más complejo. “Para aumentar
el salario mínimo sin tener consecuencias de inflación y aumento de costos de
nivel de vida en general se necesitaba la desvinculación. Después, habrá que
discutir cuál es la necesidad de aumento de salario mínimo, qué tanto, y que
tan rápido. Claramente hoy el salario mínimo ha perdido mucho de su valor”,
dice el académico del Ipade.

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El investigador asegura que si el aumento se hace demasiado
rápido o si se lleva demasiado alto pudiera tener efectos negativos sobre quién
se puede ayudar. Por un lado podría causar desempleo si crece demasiado y
afectaría los empleos formales, además de que serviría como incentivo para
crecer el mercado informal.

Leticia Armenta Fraire, directora del Centro de Análisis
Económico del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México, considera
necesario completar la desvinculación con otras acciones para que se traduzca
en una mejora de la remuneración.

“Algo que necesita forzosamente acompañar el incremento de
salario mínimo es la productividad y por otro lado se requeriría una política
de redistribución del ingreso, no necesariamente atada al salario mínimo. Esta
política aminoraría la inequidad.

“El tema de la productividad es de mediano plazo. No es de
la noche a la mañana. Pasa por elevar la calidad de la mano de obra, calidad de
vida de los trabajadores, la tecnología en el sector productivo, mejorar la
infraestructura en telecomunicaciones”.

Javier Rodríguez Labastida Periodista, director digital de Alto Nivel, profesor universitario, amante de la música, deportista, maratonista, spartan y aprendiz de baile.